GNOSSIENNE Nº 777

Escucho teclear mientras me demoro escrutando las grietas de la mesa y los pequeños bulbos de la pared. Ardemos, sí, pero ya no es noticia en mi páramo de enzimas. Ni siquiera es una sensación malsana. Solo un accidente inevitable y, a lo mejor, inédito…según los expertos. Ja,ja,ja… Es tan ridícula toda esa saliva perentoria que se pierde en la ceniza de los días.

Necesitaría ser morfinómano o criminal para sugerir que el pulso diario en este tiempo es la inercia del reloj. No, no es suficiente. Tampoco una amenaza o el sadismo. Se parece más bien a un crepúsculo lento y porfiado. Oscuridad al final del acantilado donde mora Xi Jinping

Bah… nada que, no sé…Fun Lovin’ Criminals pueda suturar. A ello me pongo. Antes bebo agua ligeramente aliñada con limón y una pastilla azul.

Feed-Back

Hace mucho tiempo leí un Krakauer y más tarde lo olvidé mientras crepitaba en el horno. Pero fue plasma e insidia. Un fermento que todavía permanece en todas esas artimañas que cultivo tan meticuloso. Era tan sensible a los espumarajos. Luego llegarían las nubes y los ojos azules. Y aquí estamos.

SILKEN

Cuarenta y dos grados exuda el reloj en la muñeca mientras me arrastro por la ciudad en llamas. Trato de experimentar la aniquilación; que nadie lo cuente por mí. Todo bien. En los caminantes noto una delectación morbosa. La cercanía de la muerte excita la pulsión de los simios. Un anciano se abanica con una panfleto de E-Computer. Son extraordinarios sus bermudas malva tres centímetros por debajo de sus exiguas rodillas.

Veo un Cartel que anuncia el alunizaje de VETUSTA MORLA en esta sabana sudanesa. Me siento ajeno. El esófago aúlla por la sopa de sandía y jengibre que he comido en la burbuja Silken. Compro agua y la bebo de un trago entre la inercia y la aflicción. La Sed a esta hora es un deseo que desconoce la tregua.

LA TAREA DEL HEROE

Trato de entender el gen de las masas que se desparraman en las terrazas callejeras engullendo líquidos que, supongo, contienen todos los elementos de la fiebre. Por qué ? Esa lógica semoviente me resulta inicua. Sin embargo, ahí están regocijantes al borde de la catalepsia. Individuos en libertad; esa hipérbole.

Bien. Suficiente por hoy… Me retiro silencioso y calmo hacia la Burbuja Termostato. Albiac y Elsiane serán mi fentanilo. Antes bajo el efecto lluvia me desharé del mapa del sudor y la hipertermia. Que nadie pueda decir que me rindo.

GLACIACIÓN

Arden, ciudadanos, la cerezas en el Valle del Jerte y las bestias en Las Hurdes. Ese dato de plomo me estremece mientras cruzo el dintel y me asalta el frío artificial y la psicotropía. La sensación bladerunner me acompaña en el ascensor…Todo llegará. A que huele el final ?

ZAIREÑA/ y FOUR…

Fin. He regresado, algo torpe, a la Jaula. El safari ha concluido. Resultado: sumariamente agridulce como todo lo que es humo. Ahora mismo, domingo, 19,08 horas, recuerdo lo que ha sido como si fuera polvo sucio bajo mis pies. Mi cuerpo es una secreción abandonada a su suerte. Me reto a la supervivencia sin frigorías. Anoto: paciencia limitada. Por tanto, cada cierto tiempo, enciendo el PANASONIC . No es lo mismo, falta la atmósfera del exilio y la voluntad del extrañamiento. Aquí, en el redil, todo es inercia sin relato. El sopor milenario es el nimboestrato…

EMERSIÓN

Y la piel, ayer limpia y pulida, ahora es un feldespato que transpira. Alrededor todo es ocre y huele y la Jaula una placenta carbonizada donde los escorpiones mueren de sed (¿¿).

Bebo agua con limón con una paja y leo a HOUELLEBECQ al bies dado que internarme en su prosa de arpía es un tormento mas allá de los 30 grados. Supongo que sobre las dos de la madrugada saldré al balcón a tomar el pus del alquitrán y la calima. Para entonces, espero seguir erecto…Será entonces y solo entonces cuando cancele otro día de esta chaladura pre-veraniega en la vieja ciudad licuada.

ZAIREÑA/ THREE

Abraxas. Sigue el tedio de la termodinámica en la piel a tiras. Ardemos en una saturnal interminable. En esta tercera jornada me trasvaso a otra burbuja frigorífica solo por distraerme y enfrentarme al destino. Un taxi y diez euros después aparco en otro Hotel. Room 116. Ajusto el frío a 22 grados y leo diez páginas del HOUELLEBECQ. Listo.

Por lo demás, la calle está enmudecida a esta hora (18,34); solo hay buses y algún alma errante. La agitación ha huido. Todo es un mar vivo de alquitrán y bruma bajo un cielo beige. Frente a la ventana de la burbuja, alguna rama se despereza con una lentitud agónica. So beautiful, sin embargo.

La reverberación de los espejos escupe plomo y se funden los kilobytes. Dramatizo. Desde luego, pero alimento una extraña ansiedad para que los presagios abran sus entrañas y un río de ceniza y fulgor fumigue el estupor y la desmesura. Es que estoy viendo una foto de esa Oltra desdichada, estremecida como si le hubiera sentado fatal el Gingko Biloba del desayuno. Concatenación.

Y, finalmente, la pregunta. Resisto en el agujero o emerjo. No sé. Me emulsiono las manos con mi amiga Cloherxidina. Bebo Solan de Cabras. Mastico nueces. Me asomo a Twitter. Huyo de inmediato. Guasapeo una estupidez y espero su eco. Hoy apenas he caminado 3.440 pasos dice mi chivato cantonés. Debería, quizás… Sin embargo, no es necesario. Mi azúcar está controlado. Bah¡¡ Me voy al baño… Cancelado por hoy.

ZAIREÑA/ TWO

Observo desde el Octavo Piso el avance del desierto en la vieja ciudad herida por este Sol insumiso que parece odiarnos. Esta tarde me alcanza como un dardo impío la muerte de Trintignant y el suicidio moral de esa Oltra desdichada que pretende seguir viva. Mientras aquí en la burbuja frigorífica intuyo a las hormigas calcinadas y a los egos disueltos en un sudor impertinente.

Son las ocho y el mercurio un verdugo. Pues bien me limito a escuchar en el Air a Fred Hersch (último descubrimiento) como si fuera la última frontera antes del final. Se está estúpidamente bien en este nirvana helado esperando que me trague la noche. Que puedo hacer…sí todo está concluido…o casi…

Hay incendios desatados en Sanchezpaña y devastaciones precisas en el enjambre social que atiende atónito a lo que sucede en el escenario donde se masturban los principales.

Desciendo al sótano donde abre sus fauces uno de esos Centros Comerciales Infinity…Compro manzanas y nueces. Retorno al cielo. Cancelado por hoy…