ZAIREÑA/ ONE

La vieja ciudad en estos días de Junio es un tizón enloquecido. Su fuego inadmisible nunca se acaba. En la medianoche, cautivo en una ignominia sin sueño, el termómetro marca 28 grados. Durante la tarde, la pesadilla ha seguido su curso hasta superar la obscena destemplanza térmica de 41 grados; lo que, sin duda, ha permitido, la aniquilación de las neuronas, las abubillas y los pequeños teckel.

En este trance, he decidido exiliarme en un Hotel hasta que esta Ola extravagante y el polvo africano en suspensión termine. En su vientre me refugiaré de las llamas con un HOUELLEBECQ y HBOmix. Encerrado en una burbuja de 24 grados artificiales y una nube adormidera de frigorías desatadas, trataré de recuperar una textura humana y no esta brasa de fuego valyrio que me diluye en un coágulo de sal.

La Perspectiva

En el tránsito hacia el Hotel, me dejo, momentáneamente, las gafas en un taxi que recupero por la diligencia inmediata de la conductora. Me compro unas pastillas banales de magnesio, espirulina y neurastenia. Localizo una frutería próxima al Iglú que me he recetado. Y entro en el Recinto hotelero con un cierto regocijo educadamente controlado…

Las próximas 48 horas serán un bucle mientras en el exterior arden las luciérnagas.

CANÍCULA RELOADED – 21

Ínsula Flash

Viajo a las faldas de la Montaña Roja. Nubes, alisios y una temperatura no caníbal. Voy a traficar con la acrimonia en un Hotel recién abierto, mudejarillo, alcurnia decadente, algo veneciana. Más ecos que voces.

Para romper el clímax, bebo vino blanco con Nacha Pop en el hilo musical. Soy un bípedo petrificado en lava y ceniza. Detrás del cristal el mar de los veranos se sospecha desnaturalizado por una membrana gris vagamente triste que lo cubre. Atardecer; primer round.

Me he fugado de la madriguera que a las cuatro de la mañana se fundía en un Woke a 29 grados . Más tarde, a 11 mil metros de altitud leía a Houellebecq mientras sobrévolábamos Don Benito. A la altura de Casablanca, hastío indoloro, no atisbo el Café de Rick. Luego aterrizamos. Los bípedos aplauden, risas nerviosas. Amerizaje esquivado.

Yazcamos. Lejos, el enjambre.